martes, 4 de agosto de 2009

Ey, qué me pasa!!

Esta es mi bici, bastante limpita!

Esto es como todo. Igual paranoias mías, igual no.

Escribes en los blogs, en el twitter, hablas con los amigos y te comentan que no hay para tanto (para tanto, de qué me pregunto yo). Te encuentras con un viejo amigo y te dice que te ve cambiado, que hasta ha cambiado tu voz. Te comentan si necesitas algo, y tú te preguntas, porqué. Te ofrecen ayuda y sigues incrédulo.

Igual no es mi mejor momento, pero ¿tanto se nota? Supongo que será algo parecido a cuando entrenas sólo, piensas que tienes un buen nivel, y luego en competición ves que no. O cuando alguien se encarga de recordarte que el espejo hace tiempo que ha dejado de mostrarte la verdad, el cambio ha sido lento y acostumbrado a observarte a menudo, no distingues entre lo real y lo normal, para ti, claro.

Dicen que se nota a distancia que estoy pasando un bache... Pero me niego a pensar que es así, para mí es simplemente un momento dificil, pero puntual, y seguro que rápido. Uno de esos que tenemos todos alguna vez, porque las cosas no son tan fáciles como parecen a priori.

Como no quiero aburrir con mis penas... Prometo que será la última línea en este tono. Vamos con lo importante.

** Hoy el entreno ha sido raro, diferente. Me he levantado temprano, he desayunado como siempre, quizá más de la cuenta ( por eso de que dicen que las penas con pan son menos penas...). Y he salido, en cuanto he hecho la digestión, a entrenar. Tan sólo 1'5 horas. Suficiente para darme cuenta de que otra vez hoy, no era mi día. He vuelto a casa.

Esto es lo que yo denomino un buen desayuno!

Sin embargo, los remordimientos por haberme hecho tan poco han podido conmigo, y esta tarde he vuelto a rodar, completando 2'5 h por mi queridísimo tontódromo. Y qué bien!! No es para tirar cohetes, pero me he encontrado muchísimo mejor.

Así que al final del día, sumando todo, 4 horitas, 1'5 malas, y 2'5 buenas.... Al final no ha estado mal. Sólo espero que mañana mi cuerpo se despierte al mismo tiempo que mi mente y pueda salir a rodar, alegremente, por la mañana. Sin tener que hacer doble sesión!

Saludos!!

domingo, 2 de agosto de 2009

La respuesta está en tus manos...

Un sabio de la antigüedad era famoso por tener respuesta para todas las preguntas. Un día un adolescente, conversando con un amigo, dijo: “Creo que sé cómo engañar al sabio. Voy a llevarle un pájaro en la mano y le preguntaré si está vivo o muerto. Si dice que está vivo, lo apretaré, y una vez muerto lo dejaré caer al suelo; si dice que está muerto, abriré la mano y lo dejaré volar”.

En las últimas entradas he observado como, sin quererlo, y a pesar de hacer el esfuerzo por no repetirlo, acabo escribiendo mucho, sobre muy poco. Son tantas las cosas que contar, que al final no cuento ninguna, y ya me perdonareis que sea así.

Hoy, sin embargo, me voy a centrar en la motivación. El último post ya dejaba entrever que no estoy pasando por mis mejores momentos (si le echais un vistazo a las entradas antiguas, vereis que ésta ha sido la tónica este año). Está siendo una temporada dificil, por muchas cosas.

Es la historia que se repite. Empiezas entrenando en noviembre, con muchísimas ganas. No te importa el frío, ni pasar horas encima del sillín, no te importa perderte mil y una fiesta, siempre y cuando el domingo hayas de entrenar, disfrutas pedaleando y haciendo lo que te gusta.

Pasan los meses... La ilusión recorre tu cuerpo. Se acerca el comienzo de temporada, las primeras carreras, ver de nuevo a los compañeros, volver a sufrir, volver a sentirse importante encima de una bici. Días de competición, de esfuerzo. Si te va bien, ves todo ese sufrimiento recompensado, el sacrificio, el empeño, todo tiene por fin, un fin(valga la redundancia). Y si te va mal, trabajas, aceptas los errores, los intentas corregir, y sigues adelante.

Poco a poco el frío da paso al calor, las buenas sensaciones a un estado de fatiga casi crónico y las competiciones se hacen más frecuentes, hay más vueltas por etapas, y el pelotón, aunque cansado, rebosa alegría. Unos han acabado los estudios y otros, los más, siguen su rutina, un día a día cada vez más pesado.

Pasa el verano, se atisba ya el final, es hora de disfrutar. Entrenar sin presiones, divirtiéndote y dedicando quizá, algo de tiempo a todo aquello que no has podido hacer los meses anteriores. Corres las últimas carreras, con cierta melancolía (esto se acaba), pero sigues luchando por hacerlo bien.

Es ya octubre, y esto ha finalizado. Descanso, y volver a empezar. Es un ciclo, y se repite año tras año.

Para mí, como os decía al principio este bucle de acontecimientos se me ha vuelto dificil. Un invierno complicado, un equipo no comprometido, pocas competiciones, muchos km en solitario sin encontrar recompensa, y muchísima rabia por no poder demostrar tanto como me gustaría. En definitiva poca motivación y enorme ilusión. Así, estos últimos meses están siendo muy largos, a pesar de que intento marcarme objetivos, y trato de cumplirlos.

He de cambiar. Está en mis manos. Y no puedo perder tiempo en lamentarme. Acabar la temporada, y empezar a pensar en la siguiente. Corregir los muchos errores, y seguir poniendo todo de mi parte. Cruzar los dedos, empezar a tener más suerte (buscándola, por supuesto) y aprender a creer, a querer,a intentarlo, mirando atrás solamente para darme cuenta de lo superado, que me hará más fuerte, a no rendirme, a darlo todo. Y como consecuencia, a conseguirlo. Recobrar la motivación, las ganas. Y mantener la ilusión.

**Hoy descanso total.

Llegó hasta el sabio y le hizo la pregunta: “Sabio, el pájaro que tengo en la mano, ¿está vivo o muerto?”.El sabio miró al joven y le dijo:Muchacho, la respuesta está en tus manos…

Saludos!

PD Qué post más largo...!!

sábado, 1 de agosto de 2009

Nadie dijo que iba a ser fácil...


Mientras volvía de la carrera de hoy iba pensando en como titular la entrada del blog. Un ''Hasta los mismísimos...'' o un ''Peor imposible..'' hubiesen sido dos buenos encabezamientos; pero, en frío, las cosas se ven de diferente forma.

Me cuesta mucho escribir cuando las cosas no van bien, y me gusta hacerlo cuando van fenomenal, así que hoy, haciendo un esfuerzo, os contaré brevemente lo que pienso. Empecemos..

Un circuito de 1'5 km, 50 vueltas, muchas curvas y casi 100 participantes (sí, carreras pocas, y encima malas, pero no nos vayamos a quejar; por lo que pueda pasar...) Poca motivación, (la situación del equipo no es la mejor, ni siquiera sé si somos ya un equipo, y no lo digo, evidentemente, por lo compañeros, los mejores, sino por otros temas), salida rápida, muchos nervios, y mucha, mucha prisa. Se enfila todo, no puedo respirar, y ahí se acaba mi carrera. Otra vez.

Llevo arrastrando problemas respiratorios durante toda la temporada, algo que creía normal ( o es normal?); me suben las pulsaciones, me ahogo, y no puedo seguir. Así que poco más puedo hacer... Decir sólo que lo estoy tratando, aunque es un proceso lento. No me gusta poner excusas, no ando y punto, así que no ahondaré más en el asunto, de momento

Por lo demás, y de lo que cada día me alegro más, es de compartir buenos momentos con gente del pelotón, ya sean del equipo o no. Charlar unos minutos antes de correr, hacer lo mismo después, comentar la carrera, y hechar unas risas, son cosas ''especiales'', y aunque ahora mismo no me vaya del todo bien, estos momentos compensan las penurias.

¿Y la foto? Pues de eso trata la vida, las competiciones... Palos, bifurcaciones, nuevos caminos, un horizonte...

Saludos!!

PD Mañana más, y mejor.